Pesa sobre la conciencia cívica argentina una verdad partida en dos. Las víctimas de la dictadura conocen la mitad dolorosa. La mitad ominosa es el silencio de los victimarios que impide conocer toda la verdad. ¿Se habrá referido a esta grave situación el arzobispo de La Plata, Héctor Aguer, cuando dijo que “la memoria debe ser integral, la verdad completa, las medias verdades ofrecen mordiente al resentimiento, atizan los rencores, perpetúan el desencuentro”?
Juan Gelman
Fuente: Página 12
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